Poco hay escrito sobre esta interesante raza y mucho menos en nuestro idioma. Este es el motivo que me ha llevado a hacer una serie de guías sobre los Draenei; Su historia, sus costumbres, sus creencias,etc. Unas guías que espero os gusten y sirvan para despejar ciertas dudas que se puedan tener a la hora de rolear un Draenei o símplemente como información para los amantes de Warcraft.
Argus, cuna de los Eredar
Hace más de 25,000 años, vivían en
un planeta lejano una raza de criaturas inteligentes y enigmáticas
conocidas como Eredar. Los Eredar fueron grandes magos y la magia en
el planeta Argus floreció junto con su civilización. Estos seres
construyeron grandes ciudades, donde la paz y prosperidad podía
respirarse en aquel lugar lleno de paisajes extensos, montañas
nevadas y cuya capital más sagrada era Mac'Aree. Esta ciudad,
compuesta de minerales preciosos estaba bordeada por ríos que
brillaban incluso en la más absoluta oscuridad. Otro lugar que
aquellos que vivieron en Argus recordarán son los picos de Kaarinos.
Algunos dicen que las Cumbres Tormentosas de Rasganorte se asemejaban
a dichos montes.
Esta perfecta civilización estaba
regida por el Triunvirato cuyos líderes, Velen, Kil'jaeden y
Archimonde eran los Magi más poderosos de su especie y guiaban el
planeta con gran devoción.
Sin embargo el planeta llamó la
atención de Sargeras, el Titán Oscuro. Kil'jaeden y Archimonde, una
vez tuvieron una audiencia con él aceptaron su oferta: “Uníos a
mi, Eredar, y os daré el poder que jamás habéis soñado.” Velen,
sin embargo tuvo una visión, una visión en la que su pueblo se
convertía en demonios. Preocupado por esta visión pide a sus
hermanos que no acepten la propuesta del Titán, él sabía que lo
único que deseaba Sargeras era destruir los mundos con los que se
cruzaba. También era consciente de que sus hermanos y amigos no
poseían el don de la visión. Desesperado, Velen buscó una
respuesta. Esa respuesta pronto llegó en la forma de una dulce y
cálida voz, susurrante como el agua que corre: “No estás solo,
Velen de los Eredar.”
La voz comenzó a hablarle y se
presentó a sí mismo como K'ure, un Naaru.
Deseaba ayudar a su gente y entendía
muy bien a qué se estaban enfrentando los Eredar. Así que trazaron
un plan; K'ure dió instrucciones a Velen de llevarse el sagrado
cristal Ata'mal consigo, un antiguo artefacto Eredar, y llevar a
aquellos que siguieran su consejo hasta el pico más alto de la
montaña más elevada de Argus el día más largo del año. Ahí
serían respondidas las plegarias de Velen.
El día más largo del año llegó y
con él los cientos de aliados de Velen que no cayeron en la
corrupción.
Mientras todos esperaban la señal del
Naaru, Archimonde y Kil'jaeden habían sido notificados de estos
sucesos por Talgath, amigo de Velen y ahora traidor, que se
presentaron allí, pero ya no eran como antes, la influencia
demoníaca los había deformado y convertido en Man'ari.
El Profeta levantó el cristal de
Ata'mal y éste brilló y se quebró en mil partes, creando una
barrera de Luz que protegería a los seguidores de Velen. En ese
momento K'ure les brindó una forma de escapar, una nave gigante,
creada a partir de diamantes, que más tarde sería conocida por los
orcos como Oshu'gun o la Montaña de los Espíritus.
Kil'jaeden fuera de sí por no haber
podido atrapar a los fugitivos, ordenó que Talgath siguiera a Velen
dondequiera que fuere. Durante miles de años Talgath no obtuvo
rastro de ellos hasta que un día se topó con Draenor. El antiguo
amigo de Velen ordenó espiar el planeta y descubrió a los orcos.
En cuanto a los Draenei, o los
Exiliados en su lengua materna, permanecieron durante siglos en
Oshu'gun, saltando de planeta en planeta, donde se reveló a Velen
que el cristal Ata'mal era lo que había permitido a los Eredar
realizar tales avances en la magia, ciencia y tecnología. K'ure, con
el tiempo se convirtió en amigo y mentor de Velen. Sin embargo por
razones aun desconocidas, K'ure enferma durante el viaje dimensional
y obliga a la nave Oshu'gun a hacer un aterrizaje forzoso en el
planeta Draenor...
Draenor, hogar de los Exiliados
El aterrizaje
fue tan accidentado que el otro Naaru que viajaba a bordo de la nave,
D'ore, murió en el impacto y fue más tarde enterrado en lo que hoy
se conoce como Auchindoun.
Los años
pasaron y los Draeneis fueron estableciéndose en el nuevo planeta,
incluso tuvieron varios intercambios comerciales con los pacíficos
orcos, una raza pacífica dividida en clanes y tribus.
Pero la paz no
duró permanentemente...
Finalmente
Talgath dió con el escondite de su antiguo amigo y sus seguidores.
Kil'jaeden en lugar de arremeter contra sus antiguos hermanos,
decidió centrarse en la raza orca, y muy especialmente en el jóven
Gul'dan. Los otrora pacíficos orcos fueron sucumbiendo ante la
corrupción y la sed de sangre y cargaron violentamente contra los
Draenei en una guerra que duraría ocho años y en la que fue
diezmada el 80% de la población de Exiliados.
Muchos de los
Draeneis supervivientes fueron infectados por las energías viles de
los brujos orcos, convirtiéndoles en rotos y tábidos.
La venganza de
Kil'jaeden estaba a punto de culminar, sin embargo un grupo de
Draeneis, liderados por Velen, buscaron refugio en Marisma de Zangar
donde permanecieron escondidos.
Exodar y la huida de Terrallende
El Castillo de
la Tempestad fue creado por los Naaru como base de operaciones en
Terrallende, sin embargo, cuando los Naaru salieron de la fortaleza,
el príncipe Kael'thas y sus Elfos de Sangre asediaron el castillo y
las unidades satélites y lo tomaron bajo su control para manipular
las energías de Tormenta Abisal.
Los Draenei
escondidos, decidieron tomar una de las naves satélites del Castillo
de la Tempestad para huir de Terrallende y buscar ayuda para
reconquistar su hogar. De esa forma el grupo se infiltró en la nave
Exodar y pudieron huir. Sin embargo los elfos de sangre lograron
sabotear el motor del Exodar lo que les hizo perder el control de la
nave precipitándose al Vacío Abisal hasta chocar con una cadena de
islas conocidas como la Isla Bruma Azur y Bruma de Sangre, en la
costa Oeste de Kalimdor.
Los
supervivientes salvaron todo lo que pudieron y a quienes pudieron y
comenzaron a investigar este nuevo mundo al que habían llegado, en
poco tiempo entrarían en contacto con los Elfos de la Noche de
Costaoscura.